sábado, 27 de junio de 2020

Habla Rafael Álvarez, 'El Brujo'... silencio



Silencio… escuchemos…
La entradilla de este blog es ‘siempre hay algo que contar’… pero, a veces, merece la pena escuchar.
Silencio… escuchemos…
Debemos aprender a escuchar, pero más que aprender a hacerlo, aprender a qué merece ser escuchado.
Conferencias como las de Rafael Álvarez ‘El Brujo’ son un claro ejemplo de ello… hay que aprender a escucharlas, porque es algo que hay que saber disfrutarlo.
Ahora, mientras trabajo, lo estoy escuchando... adoro mi trabajo.



martes, 23 de junio de 2020

Hemos resistido



Pues sí, hemos resistido y esta pesadilla en forma de pandemia, al menos en apariencia, ha pasado; ahora queda esperar qué ocurrirá en los próximos meses y confiar en que ese supuesto rebrote del que todos hablan no vuelva.
Evidentemente que todavía se darán algunos casos, esto es como la resaca de una borrachera, pero, ni mucho menos, será como lo sucedido dos o tres meses atrás.
Yo soy positivo y no creo que este virus haya venido para quedarse. A lo largo de la historia tenemos ejemplos de pandemias que han arrasado a la humanidad; sin lugar a dudas la peor fue la peste negra que arrasó Europa en la edad media y que se llevó por delante a un tercio de la población. Después, la última que se recuerda, es la mal llamada ‘gripe española’, porque, precisamente, fue en este país donde menos repercusión tuvo, pero como el mundo estaba entretenido en la I Guerra Mundial era España (por no ser un país beligerante) el que más cobertura daba a lo que ocurría.
Ahora nos ha tocado esto… y pasará, pero hasta que no lo haya hecho totalmente no podemos estar seguros. Con tal de no volver a escuchar al Dúo Dinámico y su ‘Resistiré’ hago lo que sea, aunque siempre es mejor el ‘Resistiré’ que no el ‘Sobreviviré’ de Mónica Naranjo.
Por cierto... ya tengo un lugar en el que pasar las vacaciones... en el salón de mi casa con el aire acondicionado. Ya que he llegado hasta aquí no voy a tirarlo por la borda por ir a lugares que no deba, otro año será.

sábado, 20 de junio de 2020

Felicidades reina avispa


Cyrano tiene algo… es el verbo afilado… la ironía personificada… y la literatura bien estructurada.
Sí… si pudiera ser un personaje de cine sin duda que querría ser él, el Cyrano que interpretó magistralmente Gerard Depardieu.
Toda la película en sí es una obra de arte, con unos diálogos inolvidables.
Llevo un par de días recodando el fragmento del duelo entre Cyrano y Valvert. Es sencillamente sublime.
Valvert es limitado (digámoslo en tono cariñoso, limitadito), es decir, no da para más y se enfrenta a Cyrano sin ser rival para él a lo que el poeta, después de ridiculizarlo, acaba diciéndole…

Poco más o menos esto dicho me hubierais si un poco más de ingenio y letras tuvierais. Más al parecer poco ingenio en la cuna recibisteis, y en cuanto a letras muy pocas tuvisteis. Sólo son siete, que forman la palabra ¡cretino!
Y si vuestro seso tuviese más tino yo no me hubiera lucido ante la galería provocando en la gente esta algarabía.
Si hubieses pronunciado una pequeña broma ingeniosa os juro que yo no habría dicho ni coma. Puedo ser muy gracioso, pero si alguien me irrita me pongo furioso”.

Hace un par de días he recordado que hace algunos años ‘A orillas del río Piedra me senté y lloré’.
Hasta Valvert sabría reconocer que aquel lugar es impresionante… y Cyrano esboza una sonrisa mientras piensa, irritado y con furia, ¡cretino!
Cyrano, en la escena final, pronuncia un monólogo impresionante…

Sí, todo me lo quitaréis, el laurel y la rosa lleváoslos, pero me queda una cosa que me llevo, y esta noche cuando entre en la casa de Dios, brillará intensamente mientras diga mi adiós algo que inmaculado meceré en un arrullo y me lo llevaré para siempre, y es… mi orgullo”.

A pesar de Valvert… ¡Feliz cumpleaños reina avispa!



sábado, 13 de junio de 2020

Micro XXIII



Suponer es ignorar, ante la duda preguntar antes de afirmar.

martes, 9 de junio de 2020

Pau Donés



Acabo de enterarme que ha fallecido Pau Donés, el cantante de Jarabe de Palo.
¿Quién no ha escuchado nunca La Flaca? ¿Quién no conoce su estribillo? Era el verano del 97… ¡ay aquel verano!
“Por un beso de La Flaca yo daría lo que fuera, por un beso de ella, aunque sólo uno fuera…”



Y El lado oscuro…


Hay dos días en la vida…


Agua…


Depende…


Evidentemente que tiene muchas más, pero yo aquí he citado las más características o en las que más me puedo identificar.
A Jarabe de Palo lo vi en un concierto en fiestas de mi pueblo, creo que sería sobre el 2002 ó 2003. La verdad es que en el escenario no transmitía mucho… pero sus letras invitaban a la reflexión en una tranquilidad dibujada en el instante.

sábado, 6 de junio de 2020

Un juguete cambió mi vida



Fotografía: Javier Costas Franco

De pequeño mi madre decía que tenía manos que parecían pies porque tenía, no sé si la afición o mala costumbre, de romper las cosas. Los juguetes que podía los desmontaba para ver su interior y luego ya era imposible, en la mayoría de las veces, volver a montarlos.
Pero todo cambio cuando tenía siete u ocho años. Mi abuelo materno me regaló un juguete que cambió mi vida, ese regalo era un Exin Castillos, un juego de construcción de castillos que creo que todos conoceréis.
Aquello era maravilloso. Yo, un niño, tenía el poder de construir castillos. Todo ello derivó en otras cosas; los castillos eran construcciones de otra época, lo que también despertó mi amor por la historia. Aquello era algo sorprendente y yo sentía que había descubierto algo de lo que quería aprender más y más. Fue entonces cuando le dije a mi madre que quería ser arquitecto. Ella, siempre recordaré sus palabras, con cierta gracia me dijo: “con lo que a ti te gusta romper las cosas, ¿cómo vas a construir?” El resto ya forma parte de la historia.
Había en tercero de carrera una asignatura cuatrimestral que se llamaba ‘Demoliciones en la edificación’. Era optativa, pero no lo dudé, me matriculé con toda la ilusión del mundo y recordé mi infancia… cuando rompía las cosas… cuando mi abuelo me regaló el juego para construir castillos… cuando mi madre aludía a mi afición por romper cosas. Esa asignatura era sorprendente y me atrevería a decir que fue la única de toda la carrera a la que no falté ni una sola clase. Yo estaba en un sueño: ¡la arquitectura también servía para romper cosas! En clase seríamos unos sesenta alumnos y yo (no lo cito por pedantería) fui el que sacó la nota más alta de toda mi promoción, la asignatura en la que saqué la mejor nota de la carrera, si no recuerdo mal fue un 9’1.
Desde que acabé mis estudios siempre he deseado poder hacer el proyecto de una demolición… pero pasaban los años y no llegaba… hasta hace tres meses. Llegó, por fin, el trabajo tan deseado. Un proyecto para demoler en una parcela un muro de unos 180 metros lineales y 2 de alto, dos naves y una pequeña vivienda. Aunque ya hace años que estudié aquella asignatura durante este tiempo lo volví a recordar todo como si fuera ayer; especialmente a mi antiguo profesor de aquella materia José Luis Castellot, en su último año de docencia por la jubilación, con su larga barba blanca y ya tristemente fallecido desde hace algunos años. Puedo decir que he disfrutado como aquel niño que rompía las cosas para ver su interior.
El lunes entrarán las máquinas y en ese momento sonreiré… recordaré… y seguramente lloraré.
Al final todo llega, simplemente hay que tener paciencia.