sábado, 13 de agosto de 2011

Me están buscando; soy el Matador


Me gustaría hablarte y podértelo contar. Decirte que no me han vencido, que les he derrotado, aunque ellos, al final, han podido conmigo; que mi derrota es dulce que su victoria es amarga porque no saben vencer de otra forma; que no puedo seguir porque hay cosas que no puedo permitir.
Sí, me he enterado por otros que incordio, que molesto, que mis palabras son como aguijones que pican e inyectan verdad transformada en veneno para quien no las quiere oír o leer. No me vendo.
No puedo permitir que otros paguen por mis verdades, que posiblemente no lo sean tanto hacia quien van dirigidas… pero son mías… mis ideas… mis sentimientos y… una idea es un sentimiento y un sentimiento no se puede juzgar.
Alguien dijo “prefiero morir de pie que vivir siempre arrodillado”. El problema no es que muera uno mismo, el problema es que muera alguien que no tenga nada que ver con lo que tú haces.
Es difícil, no se puede luchar contra un sistema hecho para que unos cuantos gocen. La libertad de expresión molesta, incordia, todo es una patraña y cuando levantas la voz… hay riesgos.
Yo puedo afirmar que esto es así y como no me apetece que, insisto, otros paguen por ello dudo si merece la pena seguir…
La pluma es más poderosa que la espada. Es cierto. Quizá, por ello, todas las dictaduras y las satrapías siempre se han quitado del medio a aquellos que sabían mejor escribir que luchar. En la actualidad no es distinto.
Quedaros vosotros con vuestra falsa sonrisa, vuestras mentiras, vuestro fachada y yo me quedo con mi dignidad, mi orgullo y mi conciencia, aunque dolorida, limpia. No hay nada como poner la cabeza en la almohada y dormir tranquilo; yo lo hago.



7 comentarios:

Luis López dijo...

A por ellos!!!!!!!!!!!!!!!!!
Adelante. A tu disposición en los malos momentos (y en los buenos, claro)

Marino Baler dijo...

Muchas gracias Luis. Las palabras de aliento se agradecen.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Imagino que te ha pasado algo para escribir esta entrada por que te veo un tanto desmoralizado.
Yo Creo en la democracia, en el estado de derecho y en la libertad de expresión, pero muchas veces todas esto es una utopía, en donde la gente no acepta nuestra opinión si es contraria a la de ellos, te pueden llegar los palos por todos los lados solamente por decir lo que piensas.

Marino Baler dijo...

Así es Maikel. Tú puedes decir lo que quieras pero cuidadito conmigo que si me molesta, aunque sea cierto, puedes buscarte un problema.
Y aquí el problema no es decirlo o no; el problema es que acusan a otro de decir lo que no ha dicho (paradojas del destino) y eso es algo que no se puede permitir. Si a ti te dicen que has dicho algo, cuando realmente he sido yo y me entero de que te acusan... ¿qué hago? No puedo continuar por el mismo camino y no porque no tenga razones, sino porque tú no tienes nada que ver.
Es complicado, muy complicado ir contra ciertos estamentos y más si tienen poder y medios. Yo sí creo en la democracia pero también creo en la libertad en la igualdad y en la fraternidad, no en un sistema déspota donde solamente se acuerdan de uno cuando tiene que votar y el resto del tiempo es un número de la SS, un DNI o una fecha para ir a pagar los recibos. Creo en un sistema donde se puedan decir las cosas sin miedos y sin coacciones. Hoy es una utopía.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Este es un problema a todos los niveles tanto político como a nivel de empresa, en asuntos políticos nunca he tenido ningún problema porque soy bastante sensato en mis comentarios, porque nunca se quien puede llegar a leer lo que pongo y hay que tener cuidado.
Pero con los colegas y en alguna empresa sí que he tenido algún problemas de estos, y lo que tengo muy claro es que siempre hay que dar la cara y evitar que otros paguen por lo que nosotros hemos dicho o hecho.
Saludos y ánimo

Anónimo dijo...

Estoy escribiendo desde mi ignorancia sobre el asunto que te ha llevado a escribir esta entrada.
Pero la vida me ha enseñado que la democracia real no existe y la libertad de expresión tampoco y me lo han enseñado a base de ostias.
Saludos

Anónimo dijo...

Una persona muy cercana a mi y de avanzada edad, me solía decir:
mata más una lengua bien usada,
que una espada bien afilada.

Álvarez.