Recuerdo que cuando estudiaba había una asignatura que me gustaba especialmente: geometría descriptiva. En ella, se representan gráficamente figuras a través de la proyección ortogonal de un plano. Para ello, únicamente se utiliza el punto, la línea y el plano.
Es lo único que de vez en cuando practico para no olvidar, aunque hayan pasado algunos años; no sé, sería difícil explicarlo, pero me encanta y apasiona; me parece magnífico. Las líneas se cruzan, aparecen, desaparecen, se cortan y el resultado es fantástico. Al principio puede parecer un galimatías irresoluble y dan ganas de dejarlo, pero con paciencia y tiempo merece la pena todo el esfuerzo dedicado. Lo que al principio es complicado, luego no lo es tanto. Simplemente hay que analizarlo.
Todo en la vida es geometría y nosotros formamos parte de ella. A veces, una línea recta no es el camino más recto entre dos puntos.
Alma, me alegra mucho que hayas vuelto.
1 comentario:
Lo importante es hacerlo con ganas y disfrutar todo el proceso.
Un saludo 😊
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