He ido en varias ocasiones a diferentes exposiciones de sus obras y he visitado en más de una ocasión el Museo de Sorolla en Madrid. También en Valencia, en la Fundación Bankaixa y en el Museo San Pio V. Y lo que te hechiza Marino, es lo mismo que a mí, la luminosidad que Sorolla supo plasmar como nadie en sus cuadros, la luz y los colores del mediterráneo.
Veo esa vela con las sombras y la luz del sol, su pliegues y no puedo dejar de mirarla. Bien es cierto que la luz de Valencia que Sorolla plasmó es única; otros la han imitado, pero él fue el primero... esos rosas al atardecer no los he visto ningún otro lugar del mundo.
A mí me gusta todo Sorolla. Su luz no solo es patrimonio valenciano -obviamente él la captó allí y es un homenaje vivo y permanente en su obra- y supongo que es mediterránea en general. Celebro que hayas traído el cuadro y el pintor. No hace falta que diga más, simplemente lo contemplo.
Hola Fackel, bienvenido a mi blog. Como he dicho antes, no soy un entendido en pintura; pero la luz de Sorolla en la zona de Valencia (desconozco el motivo) es única, y no lo digo de forma arrogante, los atardeceres en la Albufera (por poner un ejemplo) tienen algo especial, se puede ver en otros cuadros de Sorolla de temática valenciana. Cambia, por ejemplo, de ver una puesta de sol en la costa de Málaga, en la propia Albufera o en Gerona.
¿Qué os puedo decir? Escritor de vez en cuando, políglota frustrado y lector compulsivo. Difícilmente asombrable, con enorme afición por la ironía y el sarcasmo (si me obligan a ello). De ánimo variable y sonrisa escasa. Odio el ruido sin sentido, la burocracia, la mala educación y la impuntualidad. Soy de izquierdas hasta para escribir. Republicano convencido, ateo, quijoteinómano y machadiano. No soporto a las personas fatuas y a los prepotentes sin motivos. Me irrita con enormidad la gente que no habla con corrección y, especialmente, aquellos que creyéndose que lo hacen no pronuncian los participios olvidándose de la "D". Omito mis sentimientos... es una lección que he aprendido; temo que resulte comprometedor o demoledor. Quizás puedo llegar a ser un ángel o alguien insignificante que simplemente pase por tu lado.
6 comentarios:
He ido en varias ocasiones a diferentes exposiciones de sus obras y he visitado en más de una ocasión el Museo de Sorolla en Madrid. También en Valencia, en la Fundación Bankaixa y en el Museo San Pio V. Y lo que te hechiza Marino, es lo mismo que a mí, la luminosidad que Sorolla supo plasmar como nadie en sus cuadros, la luz y los colores del mediterráneo.
Veo esa vela con las sombras y la luz del sol, su pliegues y no puedo dejar de mirarla.
Bien es cierto que la luz de Valencia que Sorolla plasmó es única; otros la han imitado, pero él fue el primero... esos rosas al atardecer no los he visto ningún otro lugar del mundo.
Ahí está la diferencia de Sorolla con otros.
A mí me gusta todo Sorolla. Su luz no solo es patrimonio valenciano -obviamente él la captó allí y es un homenaje vivo y permanente en su obra- y supongo que es mediterránea en general. Celebro que hayas traído el cuadro y el pintor. No hace falta que diga más, simplemente lo contemplo.
Salud. Gracias.
Hola Fackel, bienvenido a mi blog. Como he dicho antes, no soy un entendido en pintura; pero la luz de Sorolla en la zona de Valencia (desconozco el motivo) es única, y no lo digo de forma arrogante, los atardeceres en la Albufera (por poner un ejemplo) tienen algo especial, se puede ver en otros cuadros de Sorolla de temática valenciana. Cambia, por ejemplo, de ver una puesta de sol en la costa de Málaga, en la propia Albufera o en Gerona.
Un saludo
Me fascina...
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